Sin su aporte y compromiso no sería posible que a través del programa Experiencia Empresa, muchos estudiantes de colegios Técnico Profesionales realicen su pre-práctica en Itaú. Son los tutores del banco que en forma voluntaria guían el aprendizaje de los alumnos.
Experiencia Empresa es un programa de inducción al mundo del trabajo que abre oportunidades para que alumnos de colegios Técnico Profesionales realicen su pre-práctica profesional en Itaú, guiados por un colaborador del banco que en su rol de tutor acompaña el aprendizaje del estudiante. Este año fueron 86 los colaboradores del banco que formando parte del voluntariado de Fundación Itaú, recibieron a alumnos de tercero medio de Santiago y Valparaíso, destinando parte de su tiempo y energía a compartir con ellos durante dos semanas, acercándolos a los desafíos que representa el mundo.
Para Gonzalo Canales, supervisor de operaciones hipotecarias, Experiencia Empresa “fue una oportunidad para transmitir mi experiencia personal al alumno, mostrarles en la realidad lo que significa integrarse a un equipo de personas que tienen distintas preferencias, personalidades y caracteres. Eso es fundamental para desarrollar habilidades que a futuro les permitan interactuar e integrarse a distintos contextos. Somos personas que mueven personas y que nosotros podamos expandir y colaborar con el desarrollo de estos jóvenes es un regalo”.
He sido tutora en varias ocasiones y lo que me mueve es ayudar y darle la oportunidad a un alumno para que sepa cómo es el día a día en un lugar de trabajo. Me gusta participar con los chicos, conocerlos y escucharlos, porque son en esas conversaciones en las que se puede generar un espacio en el que los motivemos a seguir adelante con sus estudios para que estén más preparados para luego integrarse al mundo del trabajo”, señaló Hyeri Yu Araya, asistente de servicio al cliente de la sucursal Viña Libertad.
Hugo Gallardo, analista de operaciones, está muy contento porque “cuando conoces a alguien te vas empapando de nuevas cosas porque compartes realidades y visiones distintas. Tú entregas algo que es importante y que trasciende el conocimiento. Estos chicos son el futuro, nosotros ya tenemos un camino recorrido, y guiarlos es una gran responsabilidad, ya que ellos tienen muchos sueños, muchas metas y ambiciones. Entonces qué mejor que darles una manito y decirles: “Mira sabes que yo me tropecé ahí, no te tropieces tú”. Compartir nuestras propias experiencias no es solo valioso para ellos, sino que también para nosotros”.
“La verdad es que es mucho más trascendente de lo que uno pueda creer, porque al aportar un granito de arena y dando un impulso, un pequeño empujón a los sueños, a las expectativas de estos chicos ellos van a aportar no sólo a una mejor sociedad, si no también, a una alegría, a un logro familiar. Que ellos salgan de cuarto medio y tengan el impulso de seguir estudiando es un éxito para ellos, para sus familias y también para mí como tutora. Este es mi segundo año en Experiencia Empresa y si bien siento que he aportado al alumno, la verdad es que yo he ganado muchísimo”, dijo Jessica González, jefa de proyectos.
“Nosotros estamos encantados de recibir a los niños, porque vienen con una gran disposición para aprender y aplicar lo que ellos saben, entonces llegan con un entusiasmo muy grande y la verdad es que al compartir con ellos nos contagian ese entusiasmo. Es muy bueno también para nosotros, porque se generan espacios en los que nos cuentan sus experiencias de vida que son súper potentes, y nosotros nos quedamos con la alegría de ver que se van contentos”, señala Caterina Gallardo, agente de la sucursal Viña Libertad.
He sido tutora durante cuatro años y esta nueva experiencia me deja un cúmulo de aprendizaje, agradecimiento por lo que tenemos, que yo creo que eso es súper importante. Me deja sonrisas, momentos chistosos, momentos de llamarlos al orden, momentos de reflexión, creo que son muchas cosas las que te deja y por lo mismo invito a muchos más a desafiarse, a ser tutor, a vivir el programa. Enseñar es importante, una gran responsabilidad, y lo importante es motivarlos y mostrarles que ellos pueden, que van ser capaces”, destacó Karina Chávez, sub gerente de cultura y gestión de conocimiento de Itaú.
“Es primera vez que participo y para mi es gratificante, creo que es importante darnos un tiempo para recibir a estos lolos que tienen muchas expectativas. Siempre me ha gustado trabajar en forma social y acá tengo la posibilidad de poder enseñar a un chico lo que significa nuestra empresa, porque ellos se están abriendo al mundo y mi experiencia de tantos años de trabajo les puede servir para demostrarles que todo se puede, que no hay límites, que los limites se los pone uno, y entonces los sueños se pueden cumplir y demostrar que uno puede optar a trabajar donde quiera trabajar y ser feliz, comenta con entusiasmo Marcela Suzarte, jefe de plataforma sucursal personal Bank de Viña del Mar.