Novedades
Voluntarios de programa Leamos juntos se capacitan en técnicas de lectura
Tras dos años de formación a distancia, Fundación Itaú reunió a 24 voluntarios en dos talleres de técnicas de mediación lectora con la experta Javiera del Real, más conocida como María Alegría Cuentacuentos.
“Imaginar para crear, crear para contar” fue la invitación que se les hizo a los voluntarios de Banco Itaú en las jornadas de capacitación diseñadas para aprender distintas técnicas de mediación lectora y recomendaciones claves, que les permitirán realizar una mejor lectura dramatizada de cuentos tanto para niños entre 3 y siete años de edad como personas mayores en situación de vulnerabilidad. Estos son los dos públicos objetivos del programa Leamos Juntos, cuyo propósito es fomentar la lectura, a través de sesiones de cuentacuentos realizadas por colaboradores del banco en jardines infantiles públicos, escuelas básicas y establecimientos de larga estadía para adultos mayores que participan de esta iniciativa.
.
El interés de Fundación Itaú por el fomento lector nace de entender la lectura como una práctica sociocultural tan importante, que su aprendizaje debe ser visto por la sociedad como un derecho que debe desarrollarse en diferentes momentos de la vida de las personas y de acuerdo a diversos contextos. En la primera infancia asociada al servicio de metas académicas y en la edad madura, a una dimensión cognitiva y recreativa.
Las capacitaciones partieron con ejercicios de relajación para sacar al niño que todos los adultos llevan dentro y que con el correr de la vida se olvidan de escuchar. Ya todos más conectados, los voluntarios aprendieron cuál es la estructura de un cuento y las distintas herramientas creativas que se utilizan para hacer de las historias un momento donde se despierten todos los sentidos como son las atmósferas sonoras, las voces de personajes, frases que capturen la atención de los oyentes, utilización del espacio y uso del cuerpo como un instrumento más del relato.
El sentido de conocer estos temas es que las lecturas se conviertan en un espacio de encuentro, donde los que relatan y quienes escuchan se reconozcan en las historias, produciéndose significativas conversaciones alrededor de ellas, estimulando el interés por la lectura.
Terminada la teoría, llegó el momento de la práctica grupal. Al principio, los voluntarios estaban un poco tímidos, pero con el correr del tiempo rápidamente se convirtieron en entusiastas cuentacuentistas, entreteniendo y emocionando al resto de sus compañeros de taller.
Los asistentes evaluaron positivamente el taller “Imaginar para crear, crear para contar”, destacando que este tipo de actividades junto con entregar nuevos aprendizajes, permite estrechar relaciones entre compañeros de trabajo.
“Muy buena la dinámica que se produce en el taller. Un grupo muy humano, cercano, empático y con el ánimo de entregar lo mejor de uno cuando se lee para otros”, señaló Carmen Castillo, asistente de la gerencia de Control Financiero.
“Me gustó la posibilidad de trabajar en grupo, ya que uno se va conociendo con los compañeros e interactúa con ellos desde otras facetas”, afirmó Ema Soto, Operaciones CDO Customer.
Además de las capacitaciones, Leamos Juntos con su iniciativa Lee para un Niño, enfocada a fomentar la lectura en niñas y niños entre tres y siete años, ha realizado 8 visitas a distintos jardines infantiles de la Región Metropolitana que participan del programa. Entre marzo y abril, 74 voluntarios han llevado alegría y entusiasmo a casi 400 pequeños que esperaron con mucho cariño a los tíos de las poleras naranjas, como ellos les dicen, y sus increíbles historias que los hacen bailar, correr, sorprenderse y, por supuesto, reírse de buena gana.
Al término de la entretenida jornada de cuentacuentos, los voluntarios regalaron libros a los niños y a las bibliotecas de los jardines infantiles para que su magia los acompañe todos los días. Se ha entregado un total de 102 textos.
Los establecimientos que acogieron a los motivados voluntarios son los jardines infantiles Rayito de Sol de Cerrillos, que este año se unió a Leamos Juntos, Mis Primeros Pasos de Estación Central, Los Lagos de Cerro Navia, Agua Luna de Quinta Normal, Villa México de Cerrillos, Los Copihues de La Florida. Además de los cursos preescolares del Colegio Padre Pedro Arrupe de Quilicura y la Escuela de Lenguaje Davilita de Pedro Aguirre Cerda.
“En Fundación Itaú creemos en el poder de la lectura para cambiar vidas. Estimulamos el hábito en las niñas y niños no sólo para mejorar su comprensión lectora sino también para incentivar su imaginación y creatividad”, señaló Ana Lepe, Gerenta de Administración y Proyectos.
En sus visitas, los 74 voluntarios donaron 222 horas de trabajo comunitario
Leamos Juntos
Programa de fomento lector, dirigido a niños de entre tres y siete años de edad y personas mayores en situación de vulnerabilidad y que participan de instituciones públicas o de fundaciones sin fines de lucro como jardines infantiles, escuelas básicas y establecimientos de larga estadías para adultos mayores, ELEAM. El objetivo es estimular el aprendizaje y el acceso a una literatura de calidad, a través de una estrategia de mediación lectora que son los cuentacuentos, relatados por voluntarios de Banco Itaú.
Leamos Juntos tiene tres iniciativas: Lee para un Niño; Lee y Construye, además de los cuentacuentos se instalan huertos en los jardines infantiles para concientizar a los pequeños en cuidar el medioambiente; y Nunca es Tarde para Leer, dirigido a personas mayores.
Actualmente, son 17 establecimientos de las regiones de Valparaíso y Metropolitana que participan de Leamos Juntos: 14 corresponden a jardines infantiles, instituciones con educación preescolar y escuelas especiales; y 3 ELEAM.